En el transcurso del año 2024, el departamento del Huila ha sido víctima de una alarmante ola de violencia y actos delictivos que han puesto en jaque la seguridad de sus habitantes, en especial en los municipios del occidente de la región. Estaciones de la Policía Nacional en Nátaga y Tesalia han sido blancos de atentados, mientras que los municipios de La Plata y La Argentina han sufrido secuestros, amenazas, toques de queda y reclutamiento forzado por parte de grupos armados al margen de la ley.
Esta zona, que limita con el departamento del Cauca, ha sido históricamente un territorio con presencia significativa de disidencias y otros actores ilegales, lo que ha deteriorado notablemente el orden público en la región. Ante esta grave situación, los Representantes a la Cámara Julio César Triana, Luz Ayda Pastrana y Flora Perdomo, así como el Senador Carlos Julio González Villa, solicitaron al Ministerio de Defensa y al Ejército Nacional la creación del Batallón de Alta Montaña No. 11, que estaría ubicado estratégicamente en el occidente del departamento, con el fin de frenar el accionar de las organizaciones criminales en esta área.
El modelo de los Batallones de Alta Montaña ha sido una garantía de seguridad en Colombia desde su creación en 2001. En Huila, el Batallón de Alta Montaña No. 9, ubicado en Algeciras y establecido en 2013, ha jugado un papel clave para contener el despliegue de grupos ilegales entre el Huila y Caquetá. La creación de una nueva unidad militar especializada en el occidente del Huila busca replicar estos resultados en una de las zonas más afectadas por la violencia.
Esta iniciativa es vista como una respuesta urgente y necesaria ante la creciente inseguridad, y la comunidad del occidente del Huila espera que el Gobierno Nacional actúe prontamente para garantizar la protección de sus ciudadanos y el restablecimiento del orden en la región.